De acuerdo con la primera hipótesis que se tenía era que el derrumbe pudo haber sido causado por una falla geológica. Será hasta que se obtenga los resultados del estudio cuando se decida reabrir la carretera estatal.
Elementos de seguridad pública municipal mantienen un operativo permanente en ambos extremos de la carretera Atlacomulco-Temascalcingo, para evitar que crucen los vehículos.
El punto vigilado y acordonado es el paraje de la Virgen, en donde también cruza el río Lerma; es donde se generó el deslave de rocas de más alto riesgo.
Comunidades de Temascalcingo aisladas
Lo anterior ha provocado que cerca de 20 comunidades queden aisladas y obliga a los habitantes a caminar para acudir a sus trabajos o realizar sus compras.
Los habitantes que quedaron aislados, por el momento, deben dar vuelta por el otro extremo del municipio del lado de Acambay; lo que obliga un recorrido de casi dos horas.
Según los datos de Protección Civil municipal en los días posteriores al deslave han ocurrido otros derrumbes de menor afectación, pero que siguen siendo de riesgo para los automovilistas.
La carretera se ha ido limpiando con ayuda de la Junta de Caminos del Estado de México, con el uso de maquinaria.